lunes, 29 de julio de 2013

TEATRO POR EL MUNDO

Va de lenguajes.

Resulta que estas vacaciones he tenido la oportunidad de disfrutar de tres espectáculos teatrales en contextos diferentes a los que acostumbro. A mí, que me sacas fuera de mi parcelita y me siento como Cristóbal Colón en el umbral de las Américas, me ha venido de maravilla. 

La primera, en pleno Barrio del Carmen en Valencia... 

El Teatre Talia apareció ante mí en la última noche que pasaba en la ciudad, de improviso, inesperadamente, como lo hacen todas las grandes historias de amor. En cartel, GGP, obra de Vol & Ras. No conocía a la compañía, pero no pude desoír los sonidos de las trompetas de Jericó. Un recital de Gestos, Muecas y Posturitas se desplegaron ante mis ojos. Al ritmo y soniquete de una conferencia académica, con un crescendo en el momento justo, y con diversos juegos con el público (que no por ser ya conocidos pierden eficacia), disfruté de una gran obra-espectáculo y, de camino, de una pequeña lección sobre el lenguaje corporal y el teatro. Me reí y reflexioné.

Posteriormente, en Campobasso (Italia), asistí a dos obras del Festival Nazionale del Teatro Popolare que allí se realiza cada año. 

No es la primera vez que acudo, pero me sigue maravillando ver cómo una asociación de barrio organiza este evento en el que varias compañías del país (sobre todo de la región), acuden y muestran sus trabajos, siempre reivindicando de alguna forma sus tradiciones y cultura. Así, dialectos antiguos, costumbrismo y tradición se mezclan con la comedia para dar lugar a obras muy entretenidas, correctas y estimulantes. No suele ser el tipo de teatro que más me atrae, pero admito que las propuestas son divertidas y me quito el sombrero ante lo que representan, en todos los sentidos. Sin financiación pública y sin ayudas estatales, acristalan sus raíces para que todos podamos verlas. 

El público, ese imprescindible componente del proceso teatral, acudió en masa a los tres actos que he mencionado. Su respuesta fue de entrega total, cortés y desesperada, como se arroja al amor una divorciada cuarentona. Las sonrisas despedían la noche, tras disfrutar de las diferentes obras, separadas entre sí por kilómetros de tierra, carne y sangre, y por las diferentes elongaciones lingüísticas que nacieron de una misma matriz. 

Así, el lenguaje del cuerpo, el sudor, las miradas, las diferentes lenguas y dialectos, la energía escénica y la química del teatro han demostrado una vez más que no hay barreras que romper, que eso sólo es un concepto que intentan inculcarnos los cobardes que tiemblan ante el poder de la comunicación. No hubo abismos que franquear, no hubo límites que vencer, no hubo problemas que resolver ni diferencias que superar. No hubo fronteras. Sólo teatro. 

miércoles, 10 de julio de 2013

PICOTAZO A PICOTAZO

Sigo labrando un erial con la fe que destilan los niños ciegos. No me resigno simplemente a ser. Necesito TRASCENDER. Tengo el ansia viva de no morir nunca, de recorrer el pulso de los días a dentelladas.

Cada vez más siento el rugir de mil millones de almas atrapadas en mi interior, que claman por un hálito de esperanza. Quieren salir, tener una vida. Aún puedo adormecerlas con canciones de cuna y nanas, pero pronto perderán los dientes de leche y se abrirán paso a mi través, descerrajando mi pecho y escapando por mi mirada.

Me siento como el carcelero que custodia en la prisión de su propio cuerpo al feto infectado por su debilidad. No sé si lo que hay dentro de mí mejorará en algo lo que hay fuera, pero sus zarpas desgarran con una furia irreductible.

Poco a poco, empiedro el camino para lo que vendrá. Añado adobe tras adobe, con un ojo puesto en la línea del horizonte y otro en el surco translúcido de mi temeridad.

He rebasado mis límites y he cruzado las fronteras dibujadas por mis propios miedos. He franqueado los muros de la entelequia y he metido los dos pies en el río de la impaciencia. He sometido mis caprichos y domado mis demonios. He cabalgado en la cresta de mis sueños y lamido del suelo el néctar agridulce de la derrota. He muerto y he renacido.

Ahora, como siempre, sigo siendo un proceso, un incontinuo. Sigo.   

http://www.youtube.com/watch?v=AA2D5qv5GtI  

lunes, 8 de julio de 2013

EN EL TINTERO

Durante estos meses de esfumeque bloggero, mi actividad ha sido frenética. 

He participado en varios montajes teatrales, a los que ya dedicaré, o no, alguna línea. También ha habido proyectos que han caído por su propio peso, o por el peso de los cadáveres que colgaban atados a sus pies. 

En el terreno audiovisual, alguna cosita ha surgido. Un mediometraje y un par de cortos. Incluso me vi en pantalla grande en el teatro Darymelia y en el Infanta Leonor. No está mal para tan parca producción. 

El éxito, ese fantasma errabundo que duerme siempre con otro, no me ha lanzado aún ni una mirada, pero como yo le vuelvo el culo, es normal que se enoje y pase de mí. 

He comprobado, como espectador, el talento, el arte y la variedad que hay en esta tierra mía. Como en botica, vamos. Asombrado, descubro siempre más y más gente con talento, profesionales de la ilusión que, sin medios la mayoría de las veces, engarzan ideas con delirios para ofrecer productos de calidad. 

Estoy que me subo por las paredes, en plena efervescencia, en ebullición. Algo se fragua dentro de mí, y sólo necesito el tiempo para darle forma. Inspirado a ratos, planean dentro de mi cabeza un saco de buitres calvos, que engordan a base de carroña y restos de ideas muertas. 

Tengo en el tintero alguna colaboraciones por acabar, un par de obras por empezar, y un sueño: un producto mío. Mi sello. Mi huevo. Mi estandarte. Mi marca. Mi bandera. Mi identidad. 

Lo veremos.  

lunes, 1 de julio de 2013

PARTE DE GUERRA

Dios, ha pasado tanto tiempo... Desde mi última entrada ha llovido mucho. Tengo heridas de guerra que así lo atestiguan. 

Ha sido una época convulsa, de cambios y vaivenes, de idas y diretes, de retornos a sitios donde no había estado antes y fugas psicógenas a oscuros rincones de mi mente. 

Me siento como el replicante aquel:

"Es toda una experiencia vivir con miedo, ¿verdad?.
Eso es lo que significa ser esclavo.
Yo he visto cosas que vosotros no creeríais.
Atacar naves en llamas en el cielo de Orión.
Brillar Rayos C en la oscuridad,
cerca de la Puerta de Van Hauser.

Todos esos instantes se perderán en el tiempo,
como lágrimas en la lluvia.

Es hora de morir"

¡¡Pero yo no quiero morir todavía!! —dijo Timmy.
—Bien, entonces no hay otra opción. Debes seguir viviendo —se contestó.

Pues lo dicho, toca seguir con la partida. Y eso nunca he dejado de hacerlo. Soy un adicto, lo admito. No pasa nada, ¿verdad? A fin de cuentas tú también lo eres. 

Tu tu tuuuuu tururuuuuu turuuuu (onomatopeya de una corneta oxidada)

¡Declaración de intenciones del Excmo. Sr. Sumidero!

Se hace sabeeeer, por orden de mis santos cojoooones, a fecha de 01 de julio del 2013, Dios mediante y sin que nadie lo remedie, en pleno uso de mis facultades mentales (o de lo que queda de ellas)...

                 que voy a seguir viviendo como así me parezca
que soy uno y trino
que me gusta  el chorizo frito y los platos de cuchara
que el teatro es lo más grande que existe, después del amor (y a veces antes)
que las almorranas escuecen pero más escuece la mentira
que los pedos con carga manchan los calzones pero aligeran el miedo
que no hay marcha atrás que valga
que estoy convencido de no saber nada a ciencia cierta
que no moriré nunca
que mis miedos levantan mis anclas
que no duermo por mantenerme despierto
y que pienso seguir atrapando la vida a dentelladas, a puñados,  a pellizcos si hace falta.

He dicho.

Ya nos pondremos al día, ya.